La imagen es para imprimirla y colgarla en tu habitación: el McLaren W1 inmerso en el espectacular paisaje de Arizona, circulando por lenguas de asfalto en medio del desierto. Pero el nuevo hipercoche británico no estaba allí para una sesión fotográfica, sino para poner a prueba su sistema de propulsión de 1.275 CV bajo el calor del Salvaje Oeste.
Allí, el bloque V8 hizo oír su voz, empujando al máximo, ayudado por un motor eléctrico. Después de las sesiones, de vuelta a casa, pues toca recopilar la avalancha de valiosos datos cosechados y aplicarlos en la fase definitiva, antes de las primeras entregas.
Ninguno como él
No tanto por el precio (a partir de 1,9 millones de euros por cada uno de los 399 ejemplares previstos para la producción), sino por lo que es capaz de hacer. Sí, porque sus 1.275 CV son un récord para la casa de Woking: nunca antes hubo un McLaren tan potente. Y extremo.
Un hiperdeportivo que sigue la estela del McLaren F1 primero y del P1 después, superándolos en todos los aspectos. El secreto no está sólo en la electrificación, sino también en el peso: sólo 1.399 kg, para una relación peso-potencia de 991 CV/tonelada. Se conduce bajo los parámetros de la propulsión trasera, un diferencial electrónico y un cambio automático de ocho velocidades.
Ligereza extrema gracias a un chasis monocasco, fibra de carbono en cantidades industriales y un interior minimalista (al que se accede abriendo unas espectaculares puertas denominadas 'Anhedral Doors') que no renuncia, sin embargo, al confort con aire acondicionado, instrumentación digital, cuero por todas partes, etcétera.
Galería: McLaren W1, pruebas en Arizona
Como complemento, una aerodinámica estudiada hasta el más mínimo detalle que utiliza un alerón trasero activo, inspirado en el del F1 GTR de 1997, para mejorar la resistencia aerodinámica y aumentar la carga descendente. O una toma de aire en el techo (una primicia en un McLaren de calle) que envía corriente fresca al compartimento del motor.
Un misil tierra-tierra con una hermosa voz (haz clic en play en el vídeo para comprobarlo) y capaz de pasar de 0 a 100 km/h en 2,7 segundos, para deleite de sus futuros propietarios. El resto, mientras tanto, nos tendremos que conformar con vídeos de este tipo.