BMW Motorrad Sagamihara acaba de presentar la R12 nineT 46Works Complete Custom #02. Si conoces la R12 nineT, ya sabes que prácticamente pide a gritos ser personalizada nada más salir de la línea de producción. Es una de esas raras motos modernas que ya parece un lienzo en blanco. La postura es correcta, las proporciones son casi perfectas y el diseño bóxer refrigerado por aire te atrae.
Por eso 46Works encaja tan naturalmente aquí. Son un pequeño taller escondido en las montañas Yatsugatake de Japón, y sus construcciones siempre tienen esa sensación de calma y confianza. Nada estridente ni forzado. Sólo un diseño limpio e intencionado, moldeado por el ojo de Shiro Nakajima para el detalle y el equilibrio.
Esta vez, la estrella del espectáculo es la pintura. El color se llama 46 Blue, y cambia por completo la actitud de la moto. Es sutil, casi discreto, pero cambia dependiendo de la luz. A veces resalta con finos reflejos metálicos. A veces se asienta en un tono más suave. Confiere a la moto una personalidad cálida y artesanal, no estéril de fábrica.
Una vez que te asientas en el color, el resto de las piezas empiezan a cobrar sentido. El carenado 'bikini', el depósito y el carenado monoplaza dan a la R 12 nineT un aspecto más ajustado. Las líneas blancas que recorren cada una de las partes de la carrocería ayudan a definir las formas y añaden el contraste justo sin resultar recargadas. Sigue pareciendo una R 12 nineT. Pero parece más acabada.
46Works ha dejado a un lado el chasis y el motor. BMW ya ha hecho la última R 12 nineT más estable y el motor bóxer sigue siendo más que suficiente. Esta custom trata de refinar la sensación visual de la moto. Los retrovisores TANAX 46 son bajos y casi desaparecen. Una insignia mecanizada 46Works se encuentra en la carcasa del motor. Nada parece atornillado porque sí.
Las barras doradas de la horquilla combinan a la perfección con la pintura azul oscuro. Las llantas de radios de alambre mantienen el aspecto clásico que se adapta a la forma bóxer. Desde algunos ángulos, parece moderna. Desde otros, parece algo de otra década. Tiene ese punto intermedio atemporal que tanto gusta a los aficionados a las custom.
Dado que la moto comienza su vida como una flamante R12 nineT, sigue contando con la garantía de BMW. El precio es de 2.998.000 yenes, unos 16.600 euros al cambio sin impuestos. También hay un cuadro de instrumentos Micro TFT opcional si se desea un poco más de comodidad digital. Dicho esto, sólo se fabricarán nueve unidades y ya hay un modelo de exposición en BMW Motorrad Sagamihara para quien quiera verlo de cerca.
La primera versión de 2024 se agotó inmediatamente, y esta segunda parece aún más afinada. No es una joya salvaje ni una réplica de competición. Es una R12 nineT de serie filtrada a través de la visión de una persona de lo que la moto ya quiere ser.
Si hay algo que define esta construcción, es cómo un solo color puede cambiar el ambiente de toda una motocicleta. Para nueve pilotos, ésta será la versión de la R 12 nineT que marcará la pauta. Para todos los demás, es una de esas motos que desearías poder ver a la luz del sol sólo para ver cómo cambia la pintura mientras caminas a su alrededor.