Hay algo innegablemente divertido en plegar motocicletas eléctricas. Miras una y de inmediato sientes esa necesidad de "tengo que probar esto". La Icoma Tatamel Bike aprovecha esa curiosidad de una manera magnífica. Atentos, porque se convierte en una maleta que puedes rodar.
Para ponernos en contexto, Icoma es una pequeña empresa japonesa fundada por Takamitsu Ikoma, quien solía diseñar juguetes en Takara Tomy, la compañía detrás de los icónicos coches en miniatura Tomica.
La Tatamel Bike parece un Transformer que se ha convertido en un producto real. Durante bastante tiempo ha permanecido como un curioso prototipo, pero ya es un modelo de producción. Plegada, mide aproximadamente 69 cm de largo y de alto, y 25 de ancho.
Galería: Icoma Tatamel Bike
Ábrela y se convierte en una motocicleta de aproximadamente 121 cm de largo, 99 de alto y 64 de ancho. Pesa 63 kilos, por lo que no es algo que quieras levantar todos los días, pero el marco de aluminio y el sistema de plegado conforman la mayor parte de esa masa.
Tiene una horquilla delantera adecuada y un amortiguador trasero, por lo que no hay esa sensación de scooter barato. Las llantas son desiguales de una manera peculiar. La delantera es de 10 pulgadas y la trasera, de 6,5 (buena suerte encontrando neumáticos para ella). La Tatamel soporta un peso de 100 kilos.
La potencia proviene de un motor de 600 vatios con un pico de 2.000, que entrega alrededor de 0,8 CV de fuerza con un máximo de 2,7. La moto alcanza una velocidad máxima de alrededor de 40 km/h, suficiente para paseos por el vecindario o recorridos cortos por la ciudad. La batería LiFePO4 de 600 vatios/hora otorga alrededor de 30 km en uso real. También hay un puerto USB, que te permite usar la moto como una pequeña estación de carga si necesitas recargar un dispositivo.
Los paneles laterales planos están impresos en 3D y son intercambiables, por lo que puedes modificar colores o gráficos cuando quieras. Toda la moto parece un gadget que puedes personalizar. Por supuesto, la gran pregunta es si realmente puedes considerarla como una maleta y llevarla en un avión. La respuesta corta es no. La batería es mucho más grande de lo que permiten las aerolíneas.
Si se usa para lo que está diseñada, tiene mucho sentido. Es lo suficientemente pequeña para guardarla dentro, lo suficientemente rápida para hacer recados y está construida con una suspensión real para que no se sienta como un juguete.
Los precios comienzan en 498.000 yenes, que son aproximadamente 2.755 euros al cambio, pero de momento la Icoma Tatamel Bike no ha traspasado fronteras. ¿Tendría utilidad en las ciudades europeas, especialmente en las más congestionadas?